domingo. 08.06.2025
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Tachas 530 • Teoría moderna del trabajo • Absalom Ávalos

Absalom Ávalos

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Tachas 530 • Teoría moderna del trabajo • Absalom Ávalos


 

A Chalón, a los Alfredos, a Juanito Huegel 

si, si bemol, la, la bemol, fa sostenido. Antes del fa sostenido, una pausa corta. No soy capaz de escribirlo más claro.
Mircea Eliade

—Te digo que Judas Iscariote besó al Maestro. 

—¿Cómo que lo besó?

De arriba se notaba un cuerpo a la deriva. Cualquier tipo de aves tratando de llegar a él. Ponle que era una paloma o buitres, el asunto es que el peso del cuerpo tiraba hacia abajo de una cuerda en la rama de un árbol. No dejó caer las monedas consigo, no, fue y las tiró a quienes se las dieron, sacerdotes, jefes. Como sea las aves pasaron de largo, este no es mi hijo amado, y por lo tanto, no tengo en él contentamiento. No era malo, era tesorero nada más, administraba. La gran palabra.

Revelación: velo quitado, con la encarnación se vela más todavía el rostro de Dios, porque Jesús mismo es el rostro de Dios padre.

—¿Qué haces?

—Estoy fuera de la alberca.

—¿Pasándola bien? - Sonaba hostil. 

Era el sonido de su voz y la del taladro por debajo de la protección auditiva. Después de que colgó la llamada mi suerte cambio. No paré de ganar.

Primero me creía rey, después caballo, y luego alfil. Según yo era un arma secreta, una pieza imprescindible en las manos correctas. Lo único que entendí es que soy un peón. Trabajar con los que trabajan es una experiencia que cala hondo. Ese conflicto con la autoridad me llevó a salir de los mejores lugares, ahora no sé donde estoy, trato de vivir con más honestidad. El cristianismo se desplaza hacia lo exterior y periférico, cuando todo habita en lo profundo. 

Los chapulines tenían unas alas de mariposa, parecían insectos sacados de la mente de  Cameron. Liebres por todas partes; el tiempo, el tiempo era lo mejor, fresco en esa parte del verano, el sol quemaba de apoco la hierba; veías pasar flores de diente de león, estábamos al borde del colapso hasta el viernes. 

El profe puso a las viejas a hacer un guacamole, me hablaba de que vio jugar a Mágico Gonzales en El Salvador, estaba entrenando a un grupo de muchachos, les decía, párate aquí

***
Absalom Ávalos (Guadalajara) Filósofo migrante. 





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