CUENTO
Tachas 561 • Dos cuentos breves • Sergio Inestrosa
Sergio Inestrosa

La carta
El hombre llegó a la hora del crepúsculo; se apeó del caballo frente a la casa de los Siete Mares. Antes de tocar la puerta, se quitó el sombrero y se sacudió el polvo de las botas y del pantalón.
En uno de los bolsillos de la camisa traía, medio húmeda por el sudor, una carta del padre, recién muerto, de una de las chicas que habitaba en esta casa muy frecuentada por los parroquianos, y de muy mala reputación.
Infortunios
Llovió toda la tarde, llovió tanto que el río empezó a entrar en los patios y después se metió dentro de las casas. Y siguió lloviendo por años, hasta que un día, como por arte de encantamientos, dejó de llover sobre la tierra.
Y salió el sol y comenzó a hacer su trabajo de secar y hacer germinar las plantas; empezando por los techos primero, después las paredes y los patios.
Después llegaron los soldados y empezó una guerra interminable, mucho más larga que el último diluvio del que hablaban los abuelos.