Guanajuato. Gto. La calidad en la atención de los pacientes tiene como tema central la comunicación humana. Si la relación médico-paciente es deficiente, la posibilidad de conflictos es muy elevada.

La Secretaría de Salud de Guanajuato (SSG) y la Comisión Estatal de Arbitraje Médico (CECAMED) ponen al servicio de la población el 01 800 7 14 23 26 y el 01 800 6 27 25 88, para la atención de sugerencias y acercamiento directo con los pacientes.

Dichas líneas sin costo tienen el propósito  retroalimentar el servicio que se brinda en las unidades hospitalarias y así mejorar los protocolos.

De parte de SSG los pacientes pueden acercarse a los hospitales para poner de manifiesto alguna queja o sugerencia como un ejercicio de dialogo, y esto servirá para retroalimentar a las mismas instituciones.

Además la CECAMED promueve  la buena práctica en la medicina, coadyuvando así a mejorar los servicios médicos que recibe la población y contribuir a la observancia del derecho a la protección de la salud.

Durante la Primera Sesión Ordinaria del CECAMED, el secretario de salud Ignacio Ortiz Aldana destacó que existe un cumplimiento de la normativa de salud para la atención de los 46 municipios.

“Hemos platicamos lo más importante es mantener la comunicación con los pacientes y personal de salud de todas las instituciones, porque somos un sistema integral bajo una política de cero rechazo y salud universal.

Ratificó el compromiso de seguir creando espacios de atención en salud dignos para que se ofrezca el mejor de los servicios.

Agregó que se cuenta con un sistema de vigilancia epidemiológica y en este tenor es importante concientizar al sistema de salud sobre los diez principales padecimientos que aquejan a la población.

“Platicábamos en relación a la certificación de médicos esto lo conllevan también los colegios de médicos, y de nuestra parte que nuestros compañeros que se integren al sistema”.

Durante el Consejo se refrendó la importancia de que el paciente conozca sus derechos, algunos de ellos es recibir atención médica adecuadas a su estado de salud y a las circunstancias específicas del caso, y ser informado cuando quiera referencias de cualquier otro médico.

Ser tratado con confidencialidad y que no se divulgue la información sobre su salud a menos que lo autorice expresamente.

Ser tratado de manera digna y respetuosa, el médico, la enfermera y todo el personal que lo atienda deben identificarse y respetar en todo momento sus convicciones personales y morales.